Hace 58 años, casi inmediatamente después de su matrimonio, Liang y Li se establecieron aquí.
No tenían dinero para construir su propia casa, ni siquiera para alquilar una pequeña habitación, así que encontraron el lugar y decidieron vivir bajo los arcos de piedra. Con el tiempo, la pareja ha establecido su propio hogar: cerdos, gallinas y algunos perros.
Dentro de la cueva, han creado varios espacios de vida: dormitorios, cocinas, una sala de estar y dependencias para los animales en la entrada.
También cultivan verduras y frutas. Dado que casi nunca tienen dinero, obtienen ropa, harina y otras necesidades en la provincia más cercana a cambio de sus propios productos, como carne, huevos y verduras.
Trabajan juntos en la agricultura. La historia de esta familia es conocida desde hace varios años. Los medios han escrito sobre ellos. Las autoridades ofrecieron a la pareja un bonito apartamento en la ciudad o una pequeña casa en el campo, pero lo rechazaron, argumentando que prácticamente no necesitan nada para ser felices.
Lo importante es que estén juntos, y eso es suficiente.
Además, después de haber vivido juntos en una cueva durante casi sesenta años, están acostumbrados a la tranquilidad, la privacidad, el aire fresco y la naturaleza, y dicen que la ciudad arruinaría completamente esta idílica vida. Ellos son felices, y eso es lo único que importa.
