Mauro Morandi, originario de la región de Emilia, Italia, nació en 1939.
Desde hace 32 años es el único habitante de la isla de Budelli, en el archipiélago de la Maddalena, en Cerdeña.
Guardián de la isla, es una especie de Robinson Crusoe moderno. La historia del hombre solitario interesó a varias personas y también a CNN, que lo entrevistó.
Morandi le dijo a CNN que había tenido un espíritu rebelde desde la infancia y que se escapó de casa por primera vez cuando tenía nueve años.
Mauro enseñaba educación física en Módena cuando, en 1989, con un grupo de amigos, decidió ir a la Polinesia para empezar una nueva vida.
Pero el catamarán se averió y el hombre tuvo que aterrizar en la isla de Budelli. Fascinado por el esplendor de este maravilloso lugar, Mauro decidió quedarse allí para siempre.
Y cuando el guardián de la isla se retiró, el hombre decidió ocupar su lugar. A partir de entonces se dedicó a limpiar la isla.
Al principio, Mauro no quería hablar con nadie, pero con el paso de los años cambió y empezó a disfrutar de pasar su tiempo hablando con los turistas sobre su vida y la belleza de la isla.
Durante el invierno hay pocos turistas y el cuidador pasa la mayor parte del tiempo solo. Declara que se siente muy solo y no sufre soledad.
Morandi publica fotos de la isla en las redes sociales, que muestran maravillosos amaneceres y atardeceres.
«La isla se ha convertido en propiedad estatal y estaré aquí hasta que el nuevo presidente del parque decida mi destino», dijo a CNN.
Morandi añade que le gustaría continuar su vida pacífica en la isla.