A pesar de mantener su relación alejada de los medios, se dice que Géraldine Nakache y Jérôme Elie-Betiya están muy enamorados.
De hecho, a menudo son vistos juntos en eventos públicos y fueron vistos de vacaciones juntos en México el mes pasado.
Se formó una unión entre la encantadora y talentosa Géraldine y el estimado actor y comediante Manu Payet, que duró de 2009 a 2011.
Pero poco después, ella se casó con su amado compañero, Jérôme Elie-Betiya, en una romántica ceremonia celebrada en el corazón de París el 26 de mayo.
Desde entonces, ambos son inseparables y mantienen una relación estable lejos de los focos.
Es un hombre muy discreto, cuya presencia es ampliamente desconocida para el público en general, ya que elige no sumergirse en el llamativo mundo del espectáculo.
La identidad del compañero de Géraldine Nakache sigue siendo en gran parte desconocida, salvo por el hecho de que lleva una vida muy diferente a la suya.
En enero de 2016, Nakache compartió con Version Femina que estaba contenta con su vida amorosa, pasando tiempo con su pareja que no forma parte de su mundo profesional.
Ella expresó sentirse amada por su pareja, amigos y familia, destacando su enfoque demostrativo para expresar sus sentimientos.
El concepto de amor protector de Nakache, aunque a veces abrumador como ella misma menciona, se centra en ser honesto y realista en su relación.
Desde entonces, la pareja se comprometió y se convirtieron en padres de una niña, que pronto cumplirá seis años.
Géraldine Nakache y Jérôme Elie-Betiya, orgullosos padres de una encantadora niña, recientemente le presentaron la película «Raya y el último dragón», en la que Nakache misma participó.
La experiencia fue transformadora, ya que su hija se enamoró de la película y le dio a Nakache la oportunidad de establecer conexiones con ella sobre temas importantes como la confianza en uno mismo.
Como resultado, Nakache pudo ganar innumerables y valiosos recuerdos con su hija, y está agradecida por tener la oportunidad de inculcarle valiosas lecciones a su hijo. Esto demuestra el estilo de crianza dedicado y estimulante de Nakache.
